Nuestro padre celestial es
un Dios lleno de bendiciones
Nosotros somos representantes
del Señor en la tierra y tenemos el privilegio de bendecir a los demás, desde niños
hasta personas mayores. Hay que aplicar nuestra fe para las bendiciones.
¿Qué podemos bendecir? Sus
vidas, su salud, sus estudios, sus planes (para bien), sus relaciones en el
futuro (amistades y matrimonio), que realicen la voluntad de Dios para sus
vidas, su fe, su salvación, su liberación, los dones del Espíritu Santo, su
fuerza espiritual, sabiduría divina, que sean bondadosos y generosos, que prosperen
en sus finanzas, que prosperen sus proyectos, que prosperen y sean ungidos sus
ministerios, y lo demás bueno que está dentro de la palabra de Dios, incluso
lugares (el hogar, la iglesia, lugar de trabajo.)
Los padres/madres, ministros,
y otros lideres espirituales (los padres/madres son sacerdotes de sus hogares
si son cristianos) deberían bendecir al pueblo del Señor en todo momento. Hay
que alejar/remover las maldiciones y proclamar en su lugar las bendiciones de
Dios. Tenemos como ejemplos de una vida de bendiciones a los patriarcas como
Abraham y Isaac, a Job, y nuestro Señor Jesucristo. Incluso, por ser salvos,
compartimos las promesas de bendición que el Señor le prometió a los
descendientes de Abraham (Romanos 11:11-24; Gálatas 3 y 4; Efesios 2:11-22).
Lucas 24:50-51 (NTV) - Entonces Jesús los llevó a Betania,
levantó sus manos al cielo y los bendijo. 51 Mientras los
bendecía, los dejó y fue levantado al cielo”.
Mateo 19:14 (NTV) – “Pero Jesús les dijo: «Dejen que los niños
vengan a mí. ¡No los detengan! Pues el reino del cielo pertenece a los que son
como estos niños”.
Job tomo la iniciativa y
no espero que sus hijos se lo pidieran: Job 1:5 (NTV) – “Cuando las fiestas terminaban —a veces después
de varios días— Job purificaba a sus hijos. Se levantaba temprano por la mañana
y ofrecía una ofrenda quemada por cada uno de ellos, porque pensaba: «Quizá mis
hijos hayan pecado y maldecido a Dios en el corazón». Esta
era una práctica habitual de Job”.
Las familias incompletas no
importan. Los padres/las madres separadas por divorcio, o porque murió uno
marido o esposa, o si tienen hijastro/as, padres/madres solteros/as no importa.
El cristiano debe tomar la iniciativa y orar y bendecir por la familia tal como
este compuesta (“Foster children” también). Jesucristo tuvo “padre adoptivo” en
José, y creció con él y María). La familia entera asistía a la sinagoga y los
festivales religiosos de su día. Aunque no vivan los hijos con sus padres, los
padres (o madres) deberían orar por ellos y bendecirlos en el nombre de
Jesucristo para que les vaya bien.
Aqui hay algunas bendiciones en la Biblia que podrias pronunciar sobre otras personas ...
Aqui hay algunas bendiciones en la Biblia que podrias pronunciar sobre otras personas ...
Salmos 20:4 (NTV) – “Que él conceda los deseos de tu corazón y haga
que todos tus planes tengan éxito”.
La bendición sacerdotal que
el Señor ordeno: Números 6:24-26 (NTV)
- “Que el Señor te bendiga y te proteja. 25 Que el Señor sonría
sobre ti y sea compasivo contigo. 26 Que el Señor te
muestre su favor y te dé su paz”.
Filipenses 4:19 (NTV) – “Y este mismo Dios quien me cuida suplirá
todo lo que necesiten, de las gloriosas riquezas que nos ha dado por medio de Cristo
Jesús.”
Judas 1:2 (NTV) – “Que Dios les dé cada vez más
misericordia, paz y amor”.
2 Corintios 9:11 (NTV) – “Efectivamente, serán enriquecidos en todo
sentido para que siempre puedan ser generosos; y cuando llevemos sus ofrendas a
los que las necesitan, ellos darán gracias a Dios.”
Salmos 67:7 (NTV) - "Así es, Dios nos bendecirá, y gente
de todo el mundo le temerá".
2 Corintios 13:14 (NTV) - “Que la gracia del Señor Jesucristo, el amor de
Dios y la comunión [*] del Espíritu Santo sean con todos ustedes”.
*Compañerismo.
Hebreos 13: 20-21 (NTV) – “Y ahora, que el Dios de paz —quien levantó
de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, el gran Pastor de las ovejas, y que
ratificó un pacto eterno con su sangre— 21 los capacite con
todo lo que necesiten para hacer su voluntad. Que él produzca en ustedes, mediante
el poder de Jesucristo, todo lo bueno que a él le agrada. ¡A él sea toda
la gloria por siempre y para siempre! Amén.”
Filemón 25:1 (NIV) – “Que la gracia del Señor Jesucristo sea con su
espíritu”.
Deuteronomio 28:6 (NTV) – “Vayas donde vayas y en todo lo que hagas,
serás bendito”.
Salmos 121: 8 (NTV) – “El Señor te protege al entrar y al salir, ahora
y para siempre”.
Shalom!
Lion of Judah/John the Baptist Ministries – Diana Washington-Valdez
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